Blogia
El Sillón Bol

Hielo de Loeb

El francés Sebastien Loeb con Citröen Xsara ha sido el primer piloto no nórdico en vencer en el Rally de Suecia. Esta emblemática prueba es la única que se celebra intégramente sobre nieve, y hasta ahora era coto cerrado de los escandinavos con 52 victorias consecutivas. Es previsible que esto cause la misma conmoción entre suecos y fineses que cuando un holandés ganó la medalla de oro de judo en los Juegos Olímpicos de Tokio, allá por el 64 y con el Monte Fuji de testigo.

El caso es que el Rally de Suecia es una carrera que gusta a los pilotos ya que se recorren pistas onduladas por entre los abetos y los lagos de la región de Värmaland, con temperaturas que pueden llegar a –30º. Manejar estos coches de competición equipados con ruedas estrechas con clavos (unos 360 por neumático) gusta mucho a Loeb, Gronholm o Carlos Sainz. En la prueba se utiliza con mucha habilidad el acelerador y se desliza constantemente controlando el derrapaje. Pura delicia.

El madrileño ha quedado varias veces segundo y tercero en Suecia. Esta vez, tras su habitual trompo, ha finalizado quinto sumando cuatro valiosos puntos para la general del Mundial. Antes en el glamuroso Rally de Montecarlo, donde por cierto también ganó el garçon Sebastien, una placa de hielo en la ruta de los acantilados de los Alpes Marítimos le dejó fuera con la cara de poker.

Loeb, que cumplirá 30 años el próximo día 26 de febrero, ha sido el encargado de finiquitar la leyenda del Rally de Suecia. Y lo ha hecho con autoridad. Esta es la sexta victoria del alsaciano, la primera que no es sobre asfalto.
No sabemos si entre los espectadores estaba el perpiscaz inspector de la policia sueca Kurt Wallander, analizando el caso del asesino sin rostro de la Universidad de Karlstad, y de paso contemplando como el mito del pilotaje nórdico sobre nieve se derrumbaba, como le sucede al del bienestar sueco que tan bién describe el genial Henning Mankell en sus exitosas novelas.

La siguiente prueba del mundial es el Corona Rally de México y será sobre tierra. Veremos si las joyas coloniales del estado de Guanajuato se impregnan de la fragancia hielo de Loeb.

0 comentarios